No hay proyecto de seres vivos que se precie si no contempla una visita a la granja-escuela.
Nos decantamos este curso por visitar la Granja La Albuquería de Coín. Subimos al autobús y allá que fuimos.
Tras el desayuno, nos entregamos a todas las actividades con entusiasmo. Comenzamos por hacer saquitos de hierbas aromáticas...¡Ummmm, qué bien huele el romero!...
Pero lo que más nos gustó fue el paseo en burrito.
Después toca comer para reponer energías.
Pintamos una ovejita a la que pusimos auténtica lana.
También amasamos un bollito de pan que metimos en el horno y nos llevamos a casa.
Y no sólo pudimos ver a los animales sino que, como estuvimos en todos los rincones de la granja, también observamos plantas, árboles frutales y coger amapolas, que sólo habíamos aprendido por las imágenes que nos enseña la seño.
Y cuando llegó el momento de volver a casa nos trajimos el bollito de pan que amasamos, nuestro saquito de hierbas aromáticas y hasta una zanahoria que sembramos en nuestro huerto.
Disfrutamos mucho ...pero el cansancio nos rindió de vuelta en el autobús.
¡ Los granjeros también descansan !
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